Le abandonamos.

Está claro que todos le abandonamos. Pasó a ser el malo de la película sin apenas poder consultarlo con el director del largometraje. Algún ser tenía prisa por estrenarla y que todo el mundo pudiera ver esa ficción convertida en realidad. Cuando la película se proyectó ya era demasiado tarde para poder cambiar su papel, se quedó con esa etiqueta para siempre. Ni siquiera corroboramos si esa etiqueta era cierta o no, simplemente nos dejamos fluir por la masa. Le abandonamos porque la película era de lo más creíble, le abandonamos simplemente porque no sabía llorar.

¿Por qué tiene que haber siempre un malo en la película? ¿ Porqué tiene que haber siempre una transposición de personalidad? Pues simplemente porque la audiencia lo pide.

Soledad

Puede ser para mucha gente una palabra con una tonalidad negativa. Al contrario que el resto de los mortales, para mí es una palabra mucho más que positiva. Con esto no digo que ame la soledad pero en cierta manera la necesito para subsistir.

El día en que no pueda estar conmigo mismo a solas, será un día para olvidar. Necesito de mi burbuja, necesito respirar. No quiero sentirme extraño por eso a veces necesito parar.

Málaga

Comer pescadito frito al lado de la playa escuchando de fondo cantautores de flamenco no se encuentra en todos sitios. Y eso que no me gusta el flamenco. Ni el pescado frito.



P.D: La foto estaba hecha con la intención de que se me viera fotografiando :)